July 24, 2009

Jamás imaginé que llegaría el día...

...en que mis acciones fueran a incidir tanto en la vida de otra persona,
...en que mis pensamientos estarían influenciados por la vida de otra persona,
...en que mis sueños futuros se basaran en la felicidad de otra persona,
...en que mis sentimientos se verían tan afectados por otra persona,
...en que mis tantos años de vida y conocimientos serían reforzados por los pocos de otra persona,
...en que mi fortaleza emocional sería quebrantada por una simple palabra de otra,
...en que mis horas comiencen y terminen dedicados a otra persona,
...en que mi esperanza de un futuro mejor se reflejara en otra persona,
...en que mis acciones se detengan con el llamado de otra persona,
...en que mis brazos se convertirían en el escudo y transporte de otra persona,
...en que mi felicidad sería completa solo con la felicidad de otra persona,
...en que mis oídos escucharían la forma más bonita que me ha llamado otra persona: Papá...!

Jamás imaginé que llegaría ese día, y desde entonces doy gracias a Dios porque llegó, y también gracias a vos mi amor por dejarme saber y vivir desde hace ya más de 4 años lo que significa ser padre..!

5 comments:

Mr. Funester said...

Muy interesante, buenisima entrada.

Dra. Paez said...

Bienbenido querido papa, te cuento que soy pediatra y he creadfo un blog donde donde doy consejos e instrucciones de como debemos cuidar a los niños en edad de crecumiento. Te invito a que me visites.

Ramielys Mejía said...

no vine pa comentar de tu post... Vine pa algo mejor....
fue a felicitarte por ser tan buen papa, tan apoyador y comprensivo, a la misma vez tan determinante y mano fuerte... jejejeje pero tan amoroso... lo vemos no solo por lo q escribes, tb por lo que escribe tu querida esposa acerca de ti. Que Dios te bendiga y te acompañe, siempre en esa bella labor de ser papito...

un Abrazote!

pvilas said...

gracias a tod@s, sobre todo a ti Ramielys, un abrazote!!!!! :)

Carolin Guzmán said...

Sencillamente hermoso! Sabes que me encanta mucho cada vez que escribes en honor a tu pequeña María Laura.

Felicidades por ser tan buen Padre!