January 12, 2009

lejos de todo...

Las estrellas iluminaban aquel cielo de la noche. Habían tantas que me recordaban lo lejos que estábamos de la ciudad, de lo cotidiano, de la civilización y su fatal empeño por destruir lo natural. Los insectos y la brisa de la noche se encargaron de entonar un suave canto, que por momentos parecían querer arrullarnos, invitándonos a seguir disfrutando de aquella paz. El clima, aunque frío, pero sin llegar a incomodarnos, solo lograba provocarnos estar más pegaditos, con los brazos y una copa de vino como abrigo, nos miramos, nos besamos y por unos minutos más nos quedamos allí, lejos de todo, cerca de nada, contemplando esa noche tan maravillosa en ese pedazo de gloria llamado Jarabacoa...

5 comments:

Filomena said...

ya me compraste con ese piropo a mi pueblo natal.

pvilas said...

:)

Unknown said...

welcome back!

Mamá said...

A magic moment!

Carolin Guzmán said...

Guao guao guao, al leerte me transporté y hasta lo sentí.
Qué bello escribes Pedro.